¿Está cansado de aburrirse? Aburrirse no es malo, al revés, resulta muy beneficioso para los niños porque les ayuda a crear, a inventar, a salirse del juego dirigido, y lo cierto es que siempre quedan ratos muertos en casa, por ejemplo, ahora debido al confinamiento debido a la pandemia por el coronavirus.
En nuestra vida habitual, los niños también tienen ratos libros tras hacer los deberes o antes de cenar; y merece la pena explorar qué hacer un domingo lluvioso por la tarde, que nos hemos quedado en casa.
Para esos momentos puede ser oportuno contar con unas aficiones caseras que ayuden a aprovechar el tiempo, sin caer en la tentación de las pantallas.
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10 Ideas para evitar aburrirse en los tiempos muertos
A veces, no sabemos qué hacer en casa cuando quedan ratos libres. He aquí algunas ideas de actividades que podemos tener previstas y preparadas para esos momentos:
1. Películas en inglés. Según la edad de los hijos, serán de dibujos animados o no. Con estas películas, un tiempo en que no estaban haciendo nada puede convertirse en un rato de aprendizaje y diversión. Para ello, debemos contar con algunos títulos en casa.
2. Plantar. Si cada hijo puede disponer de su planta, de su tiesto, durante los ratos muertos podrá dedicarse a regar, a abonar, a ponerla a la luz, etc.
3. Periódico familiar. Se trata que con revistas viejas recorten fotos y titulares que puedan hacer alusión a alguien de la familia. Que las peguen en un folio y formen un periódico. También puede servir para algún cumpleaños.
4. Comenzar el árbol genealógico. Siguiendo las orientaciones del artículo «En familia» de este número podremos intentar remontarnos a algunos de nuestros antepasados.
5. Campeonato de fútbol-chapas. Antes, hemos de disponer de un número de chapas suficiente para dos equipos y de un garbanzo. El campo puede ser una alfombra o el mismo parquet, utilizando cinta adhesiva blanca para las fueras, áreas, etc. Las porterías se hacen con cartón.
6. Juegos de mesa. También podemos disponer de algunos juegos de mesa guardados para estos ratos. Así, siempre serán momentos especiales. Juegos como el Risk o el Scrabble que apasionen tanto a mayores como pequeños.
7. Maquetas. Para estos ratos muertos podemos tener una maqueta de aeromodelismo, que iremos realizando entre todos poco a poco. Luego se pintará y, por último, podemos ir todos a hacerla volar.
8. El momento de los tebeos. Quizá podamos tener guardados algunos tebeos que sólo dejaremos leer en momentos de este tipo, cuando se aburran, cuando hayan terminado sus deberes, etc.
9. Fotos viejas. Echar un vistazo a las fotos que guardamos de la boda, de cuando éramos niños pueden crear momentos muy divertidos. También pueden ordenarse entre todos.
10. Crear juguetes que funcionen. Por ejemplo, el clásico teléfono con dos vasos de yogur y una cuerda tensa entre ellos.
Ricardo Regidor
Asesoramiento: José Luis Varea y Javier de Alba. Expertos en educación y autores de un libro sobre tiempo libre
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