Después de años dedicando tiempo y dinero a una carrera universitaria llega la hora de graduarse y con ella la eterna pregunta: ¿sigo estudiando o entro en el mundo laboral? Continuar los estudios realizando un máster, un curso de postgrado o un MBA completa la formación y ayuda a encontrar empleo.
Según datos del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, sigue creciendo año a año el número de estudiantes matriculados en máster, postgrado y MBA. Concretamente, durante el curso 2017-18, un 8 por ciento más de alumnos universitarios optaron por seguir estudiando. Así, se registró un total de 205.049 alumnos matriculados en toda España.
Debido a la gran oferta de máster, muchos estudiantes que acaban de obtener su grado y quieren seguir estudiando, se sienten confusos ante la gran oferta de formación. ¿Cómo acertar con la más adecuada para sus objetivos e intereses? Conocer las diferencias entre los distintos cursos posuniversitarios es fundamental para elegir el más adecuado.
¿Cuál es la diferencia entre un máster y un postgrado?
Estos dos tipos de titulaciones son los primeros pasos que toman los recién graduados que quieren seguir formándose, aunque entre ambos hay grandes diferencias. La que más salta a la vista es el número de horas lectivas, ya que los másteres suelen durar entre uno o dos cursos académicos, mientras que los postgrados tienen un máximo de uno, aunque normalmente no superan el semestre.
La diferencia entre la duración también repercute en el número de créditos ECTS, pues dependiendo del número de horas cursadas los másteres ofrecen entre 60 y 120 y los postgrados entre 15 y 60.
A la hora de elegir también hay que tener en cuenta si el objetivo es académico o laboral. En este sentido, los másteres suelen ofrecer una orientación más amplia que los postgrados, ya que su objetivo es tanto la investigación académica como la formación profesional. Por su parte, los postgrados ofrecen un contenido mucho más especializado y concreto, por lo que su orientación es claramente profesional.
Diferencias entre un título oficial y propio
Pese a que ambos pueden estudiarse en centros públicos o privados, los másteres oficiales están reconocidos por el Ministerio de Educación, por lo que deben superar unos estándares oficiales de calidad, mientras que los títulos propios dependen exclusivamente del centro que los ofrece.
Esto aporta ciertas posibilidades extras a los estudiantes de másteres oficiales, como la obtención de puntos en oposiciones, solicitar becas al Ministerio de Educación y la posibilidad de continuar la formación a través de un doctorado, además de tener homologación en los 47 países miembros del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES). Cabe mencionar que los másteres pueden ser oficiales o propios, pero los postgrados siempre son propios.
¿Qué es un MBA y por qué tiene tanta demanda?
Mención especial merecen los MBA (Master of Business Administration), muy valorados académica y profesionalmente, ya que ofrecen al alumno los conocimientos necesarios para dirigir una empresa. Existen muchos tipos, aunque normalmente suelen clasificarse según su nivel de profundidad: los Executive MBA están dirigidos a ejecutivos que quieren aumentar su formación, mientras que el resto suelen introducir a los recién graduados en el mundo de la administración de empresas. Y, al igual que cualquier otro tipo de máster, los MBA pueden ser oficiales o propios y privados o públicos.
Cabe destacar que existen muchas profesiones como abogado, arquitecto, ingeniero, psicólogo o profesor de la ESO que requieren de su propio máster habilitante, es decir, la formación obligatoria para ejercer una profesión en concreto. Y si un estudiante decide aumentar al máximo su formación, puede optar por los estudios de doctorado siempre y cuando cuente con un máster oficial.
Belén Arcones, directora general de IMF Business School
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