El paso del tiempo trae nuevas costumbres. La sociedad cambia y con ella también lo hacen rutinas como el desayuno. ¿Cuál es la situación actual de la que dicen que es la comida más importante del día? A esta pregunta trata de contestar el estudio Hábitos de desayuno elaborado por ANIBES.
Un informe en donde se analizan las nuevas preferencias de los españoles en lo que a desayuno se refiere. Este estudio también recoge los hábitos de los padres en lo que a desayunos se refiere y que tienen tanta importancia en tanto que los hijos toman estas actitudes como referencias y ejemplos a seguir.
¿Desayunan los padres?
Según los resultados de este estudio, la mayoría de los adultos en España desayuna de forma habitual (82,3 %), frente al 14,1 % que no siempre lo hace con esta asiduidad y el 3,6 % que se salta la primera comida del día. También hay que destacar a ese 2 % afirmaba no ingerir nada para desayunar y un 1,6 % únicamente tomaba café o té.
Por otro lado, el desayuno es una costumbre que se repite con mayor frecuencia en los adultos de mayor edad y que se evita en los jóvenes. En cuanto a los productos que más se consumen: leche y otros productos lácteos, junto con cereales y derivados (34,6 %), leche y productos lácteos con cereales y derivados y frutas (16,8 %) y leche y productos lácteos con cereales y derivados, frutas y alimentos ricos en proteínas (10,4 %), mientras que un 10 % de adultos sólo tomaba algo de leche y productos lácteos para desayunar.
Por otro lado, los adultos españoles parecen haber tomado conciencia de los alimentos bajos en azúcar y han reducido su consumo, así como los de alimentos con un alto nivel de sal. Los artículos procesados y con un alto nivel de edulcorantes artificiales y sodio. Por otro, los productos frescos han aumentado su presencia en la mesa de desayuno de los adultos españoles.
El correcto desayuno
Como se ha dicho, el desayuno que se realice por parte de los padres influye en el modo que sus hijos ven el mundo. Predicar con el ejemplo también es importante cuidar lo que se pone en la mesa:
– Un vaso de leche o un lácteo
– Un cereal (pan o, de vez en cuando, galletas, cereales de desayuno, bollería, madalenas, etc.), preferiblemente integral
– Una fruta y/o su zumo natural
– También se puede utilizar cantidades moderadas de mermelada, miel, jamón, etc.
Damián Montero
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