Qué duda cabe de la importancia del juego en el desarrollo y bienestar de todo niño. Desde imaginar ser un brillante doctor, hasta pasear en bicicleta o una partida de fútbol. Sin embargo, no todos pequeños tienen las mismas facilidades para disfrutar de estos momentos. Entre los motivos que dan lugar a estas situaciones, la falta de tiempo y el exceso de ocupaciones aparecen como dos de las explicaciones más repetidas.
De hecho, según el informe Lego Play Well, al menos el 17% de los niños se afirma como «demasiado ocupado» como para poder disfrutar del juego. Una llamada de atención a las familias para que puedan liberar de tareas innecesarias a sus hijos o para que estas actividades tan importantes para los pequeños pasen a tener una mayor trascendencia.
El juego es felicidad
Un total de 3.723 de entre 5 y 12 años y de 9.249 padres participaron en la elaboración de este informe donde se quiso conocer cuánto tiempo dedican los hogares al juego y de qué forma se desarrolla el mismo. El primer resultado que llama la atención es que el 30% de las familias afirma que no dedican más de cinco horas semanales a estas actividades.
También es sorprendente que el 38% de las familias reconozca tener problemas para organizar sus horarios y poder dedicar el tiempo que merece el juego en el hogar. Entre las problemáticas que dan lugar a estas situaciones los horarios laborales y otras ocupaciones de los padres. Por este motivo el 81% de los niños que participaron en esta encuesta reconocen que desearían que sus padres dedicasen más tiempo a estas actividades
Un problema que da como resultado la infelicidad de muchos niños. El 88% de las familias que reconocían dedicar más de cinco horas diarias al juego se afirman como felices. Sin embargo, el porcentaje desciende hasta el 75% cuando el tiempo destinado a estas actividades baja de las mencionadas.
Cómo jugar con los hijos
¿Es importante jugar con los hijos? La respuesta es sí, y así lo reconocen el 95% de los padres encuestados en este trabajo quienes. Además, el 82% de los mismos indican que los niños que participan en estas actividades tendrán más oportunidades de ser felices en su futuro. Por ello, es imprescindible saber sacar el máximo provecho a estos momentos. Estos son algunos consejos para este fin:
– Involucrarse. Los padres no deben ser unos meros espectadores del juego de sus hijos, también deben involucrarse en estas actividades.
– Usar la imaginación. Una de las virtudes del juego es que es capaz de sacar lo mejor de la imaginación de los más pequeños. Los padres deben aprovechar este factor y hacer que sus hijos potencien estas capacidades.
– Aprovechar cada segundo. El ritmo de vida que llevan las familias es muy agitado. Pero es importante sacar un rato para dedicarle al juego con los más pequeños de la casa. Cualquier ocasión es buena.
Damián Montero
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