El concepto de familia no solo se refiere a aquellas personas con las que se comparte apellido o se tiene un vínculo de sangre. También existen parientes políticos como puede ser un cuñado, una nuera o un suegro. Existe toda una mitología en torno a estas personas y si bien el hermano de la pareja siempre es el que actúa creyendo saberlo todo, en el de los padres del cónyuge el tópico hace pensar en una mala relación.
Pero, ¿son ciertos estos prejuicios? Según desvela el Centro de Investigaciones Sociológicas, CIS, en su Barómetro de marzo de 2018 no. Al menos en lo que se refiere a las relaciones con los suegros ya que los participantes en este estudio confirman que mantienen una excelente relación con los padres de sus parejas. Así es en más de la mitad de los encuestados.
Sólo un 2 por ciento tiene mala relación
Los datos del CIS muestran que la mayoría de los participantes que tienen esta relación, un 56,7% de los encuestados revela no tener este pariente político y un 3,6% no trata con ellos, califica como «satisfactorio» o «muy satisfactorio este vínculo en el que no hay consanguineidad. En concreto, un 20,5% señala como «totalmente satisfactoria» esta relación.
Al mismo tiempo, un 14,5% cree que la relación con sus suegros es «bastante satisfactoria». Lo que deja un 35% de los encuestados con un buen vínculo con estos miembros de la familia política. Por otro lado, el 2,3% señala que no es ni «satisfactoria» ni «no satisfactoria», mientras que solo un 1,1% destaca que este trato es «poco satisfactoria» y un 0,9% «nada satisfactoria».
En definitiva, datos que demuestran que en España el tópico de la mala relación entre suegros, yernos y nueras es poco real y que la familia política mantiene un buen vínculo en este sentido.
Las relaciones entre hermanos
Este barómetro del CIS también se ha interesado por la relación entre los distintos miembros de la familia con la que se mantienen lazos de sangre. Un vínculo que también se califica como «muy satisfactorio» por parte de los encuestados, muestra de ello es que el 45,9% señala que el trato con su madre es «totalmente satisfactorio», porcentaje que cae al 31,9% en el caso de los padres.
El vínculo fraternal también se presenta como muy fuerte ya que el 45,5% de los participantes califica esta relación como «totalmente satisfactoria» y en un 44,2% en el caso de las hermanas. Al mismo tiempo, los padres también apuntan a tener una buena relación con sus hijos, al menos así es en el 45,3% de los casos en el caso de los encuestados con niños y en el 42,5% de aquellos progenitores con hijas.
Por último, en el caso de aquellos encuestados que todavía mantienen un trato con sus abuelos (en la mayoría de los casos este pariente ya ha fallecido), la relación estos parientes también se califica como «muy satisfactoria» en la mayoría de las ocasiones. Tan solo un 0,2% califica este trato como «nada satisfactorio».
En cuanto a la relación de abuelos con sus nietos, el 24,2% de los encuestados señala que este vínculo es «totalmente satisfactorio», mientras que el 3,6% señala que es «bastante satisfactorio». Sólo un 0,2% apunta a un trato «nada satisfactorio. Aunque en este punto hay que señalar que el 67,6% no tiene este tipo de familia, síntoma del descenso en la natalidad en España.
Damián Montero
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