Un conflicto entre un matrimonio tiene efectos más allá de la pareja. Todos en la familia se ven envueltos en esta situación ya que en el hogar existe un vínculo que une a todos los que están presentes en el mismo. Sin embargo, el hecho de que tantas personas estén involucradas en este sentido es un punto a favor a la hora de resolver posibles problemas en la pareja.
La familia puede mediar en estos conflictos y hacer que la situación se solucione pronto. Así se destaca desde Cáritas, entidad que pone de relieve el papel que tiene el resto de parientes a la hora de ayudar a resolver estos problemas ya que pueden favorecer la humanización en las relaciones, promoviendo la restauración de la comunicación y previniendo situaciones similares en el futuro. En definitiva, creando un espacio adecuado se generen condiciones y oportunidades para transformar el conflicto en un cambio positivo.
¿Qué significa mediar?
La familia no puede actuar si no se explica lo que significa mediar. Cáritas explica que este papel no es algo que haya surgido en la actualidad, y que este rol de árbitro en conflictos es algo que llevan ejerciendo todos los parientes desde hace muchísimos años. Tantos como los que la familia lleva siendo el pilar fundamental dentro de la sociedad y siendo el apoyo de muchas personas.
La mediación familiar surge en su día aparece como una herramienta con la que buscar solución a los conflictos y evitar que estos puedan derivar en la ruptura de la pareja y afecte duramente a los pilares del hogar. No existe un modelo claro de arbitrariedad y cada núcleo requerirá un papel u otro, pero el punto en común de todos estos procesos es que se ha de favorecer el diálogo y rebajar la tensión relacionada con estos problemas. Evitar que en todo caso se produzca una falta de respeto entre los integrantes de la pareja.
Si se permite el impulso por encima de la racionalidad, los miembros de una pareja terminarán por faltarse el respeto y hacer muy difícil alcanzar un punto de solución. Es aquí donde hijos, u otros parientes como los abuelos, deben tratar de rebajar la tensión y favorecer el diálogo. Sin embargo, nunca deben tomar partida y tratar de hacer ver a una de las partes que la otra lleva más razón ya que esto podría recrudecer el conflicto.
Ventajas de la mediación
Desde Cáritas se sugieren varias ventajas de la mediación. Estos puntos se relacionan con los objetivos de los mismos, y que de alcanzarse, harán mejor la vida en pareja y el clima en el hogar:
– Mayor probabilidad de posibilidad de reconciliación de la pareja y de inicio de una nueva etapa de entendimiento y estabilidad dentro del hogar.
– Introducción de la comunicación y el diálogo entre las dos partes. El mediador pone a la pareja en contacto con sus sentimientos y sus necesidades reales, aclarando malentendidos, disminuyendo las tensiones.
– Enseñanza de una nueva forma de encarar los problemas conjuntamente, aprendizaje sobre cómo hacer las cosas y encarar de forma más positiva el futuro, sin temor a pedir ayuda a terceras personas, en esta caso familiares.
– Creación de relaciones constructivas orientadas al futuro de las que no solo se beneficiarán los miembros de la pareja, sino todos en casa. Por ejemplo, los niños aprenderán que el diálogo es mejor que el conflicto.
Damián Montero
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