El verano no solo trae calor, también aporta mucho tiempo libre a los jóvenes. Aunque es innegable que las nuevas generaciones se merecen un descanso después de todo un curso de estudios y esfuerzos, tantas horas muertas pueden terminar por abrumarlo. Para evitar este aburrimiento existen muchas posibilidades y que además repercutirán positivamente en su currículum académico, y en el futuro profesional.
Un ejemplo es el aprendizaje de un nuevo idioma. Los meses de verano pueden ser aprovechados por los jóvenes de diversas maneras para dominar lenguas como el inglés, requisito casi imprescindible en la actualidad para acceder a un nuevo puesto de trabajo. Desde ver películas en versión original hasta un trabajo en el extranjero durante el periodo estival, todo ello puede contribuir a este objetivo.
Técnicas para mejorar en idiomas desde casa
Existen diversas técnicas, que se pueden hacer desde casa y con las que llenar las horas de exceso calor haciendo algo productivo:
– Lectura en otro idioma. La lectura es un placer que debe ser practicado habitualmente, pero además también puede ayudar a mejorar un idioma. Que el joven elija una novela que sea de su agrado y se sumerja en ella mientras lee en inglés, así aprenderá cómo se usa el léxico y a construir frases en la lengua que esté aprendiendo.
– Películas en versión original. El séptimo arte gusta a todos y es un buen remedio contra el aburrimiento cuando el calor aprieta fuera de casa. Buscar una película en versión original, y con subtítulos para ayudar, acostumbrará el oído del joven a las pronunciaciones de las distintas palabras que se usan en el idioma a aprender.
– Charlas en el idioma extranjero. Toda la familia puede beneficiarse de este aprendizaje, no solo los jóvenes. Concertad una hora al día, como por ejemplo el momento de la merienda, para conversar en el idioma que se desea mejorar. Una genial idea que además fomentará el tiempo juntos.
Otras ideas para reforzar nuevos idiomas
El tiempo libre que trae el verano también puede ser aprovechado para el aprendizaje del inglés de manera más «profesional«. Estas son otras medidas que pueden mejorar el nivel del idioma que se esté practicando:
– Academia de idiomas. Profesores nativos, pruebas certificadas y un apoyo constante. Todo ello estará a disposición de los jóvenes que se apunten a estos centros. Durante el curso la carga de trabajo hacía casi imposible atender a estas tareas, pero estos meses permiten una dedicación exclusiva a este aprendizaje.
– Campamentos bilingües. Diversión y aprendizaje, estos centros conjugan todas las actividades que tienen los campamentos veraniegos y le añaden el plus de la enseñanza de un idioma nuevo. Una forma de sumergirse en estos idiomas mientras se conocen nuevas personas y se diviertan al máximo.
– Intercambios veraniegos. Esta idea permite que el joven se sumerja completamente en el otro idioma mientras convive con otra familia. Una decisión que obliga a emplear la lengua que se busque aprender en el día a día y que además permitirá aprender otra cultura. Una experiencia que ampliará las miras de quien la practica.
– Trabajo en el extranjero. Al igual que los intercambios, esta decisión hará que el joven se sumerja plenamente en el idioma. Estar de cara al público forzará a usar, y a mejorar, la lengua que se esté practicando. Además, también se enseñará una valiosa lección sobre el esfuerzo que supone un empleo y dotará al hijo de cierta autonomía durante esta experiencia. Dos materias que le ayudarán en su futuro laboral.
Damián Montero
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