¿Qué duda cabe de que la seguridad es una tarea muy importante para los padres? Evitar los posibles peligros que puedan causar daño a un hijo es una labor que mantendrá lejos muchos malos momentos: visitas al hospital, llantos del niño, lesiones que mantengan alejados del juego, etc. Por ello hay que vigilar porque el hogar sea el primer lugar libre de accidentes para los niños.
Especialmente en aquellas habitaciones en las que pasarán gran parte de su tiempo, como por ejemplo el dormitorio infantil. Los más pequeños de la casa pasan gran parte de su vida en esta sala ya sea jugando, durmiendo o realizando deberes. Los padres tendrán que tener varios puntos en cuenta con el fin de garantizar la seguridad de sus hijos en esta zona.
Camas y cunas para el dormitorio infantil
Como se ha dicho, el dormitorio infantil es uno de los lugares en donde más tiempo pasa el niño porque precisamente es allí en donde duerme. Tanto la cama como la cuna deben ser tenidas en cuenta para evitar accidentes durante la noche. En el caso del lecho de los bebés, estos son algunos de los consejos que ofrecen los pediatras:
– La postura más indicada para los bebés es boca arriba ya que de forma contraria se produce más inestabilidad y provoca más inseguridad.
– Se deben evitar los objetos blandos en la cuna durante la noche, como por ejemplo peluches o cojines.
– Los protectores, aparte de ser objetos blandos, que se sujetan con cintas, pueden servirle al niño para trepar.
– No deben utilizarse cojines con el fin de evitar la plagiocefalia (aplanamiento de la cabeza).
– El espacio entre los listones de la cuna debe ser inferior a los 6 centímetros.
En el caso de la cama, nunca tendrá que producirse el cambio de lecho mientras el niño mida menos de 90 centímetros. Con el fin de evitar las caídas, se puede colocar algún tipo de barandilla. Junto al colchón se puede colocar una alfombra o moqueta para reducir el impacto en caso de que el pequeño se precipite al suelo.
Si se opta por una litera para acostar al niño, lo primero que se debe tener en cuenta es que cualquier menor de 6 años no debe dormir en uno de estos lechos. Las escaleras para acceder al segundo nivel de estas camas deben quedar bien sujetas y el somier de esta zona tiene que estar bien sujeto para no caerse encima de quien duerme debajo.
La litera debe tener una barra protectora de cuatro lados y con unas medidas de 16 centímetros de altura con barras separadas por 7 centímetros. Los padres deben vigilar que los niños no jueguen en la parte superior de este lecho ya que podría provocarse una caída accidental.
Otros elementos del dormitorio infantil
Junto con las camas, hay otros elementos que deben tenerse en cuenta en el cuarto de los niños para evitar accidentes, Uno de ellos son las estanterías, que en el momento de colocarse deben fijarse a la pared y revisarse periódicamente para advertir posibles grietas en las sujeciones.
Otros elementos de la habitación infantil como las ventanas deben contar con elementos que impidan su apertura completa para evitar que el niño se precipite al vacío. Se deben evitar la presencia de elementos como muebles o mesitas de noche en zonas próximas a sus marcos para que los menores no puedan subirse y acercarse al hueco donde es posible la caída.
Las puertas deben contar con sistemas que impidan su cierre completo ya que de este modo se evitará que si el niño mete la mano por los huecos, pueda pillarse los dedos y provocar alguna lesión.
Damián Montero
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