¿Hay un niño en camino? ¡Enhorabuena padres! La llegada de un nuevo miembro a la familia es una excelente noticia que se debe celebrar por todo lo alto, aunque también supone trabajar. Hacer que cuando llegue este miembro al hogar se encuentre un entorno favorable para su desarrollo y que le asegure un ambiente de seguridad para su crecimiento.
Un hogar bueno para el adulto no significa un lugar seguro para el bebé. Son muchas las cosas que se han de preparar en casa antes de que el nuevo miembro llegue. Un trabajo que supondrá un crecimiento muy favorable para el pequeño y que evitará más de un quebradero de cabeza.
Artículo relacionado:
– Retos de la familia ante la llegada de un nuevo bebé
Lo que debes tener en cuenta
– Examen de seguridad en casa. ¿Estás seguro de que tu hogar es seguro para un bebé? Los peligros que pueden afectar a un adulto no son los mismos que pueden causar daño a los niños. Los productos de limpieza deben quedar alejados del alcance del pequeño y las puertas deben tener sistemas adicionales para que los menores no accedan a productos peligrosos.
– Advierte a los visitantes. La llegada de un bebé es una noticia que alegra a toda la familia. Pero toda esta emoción debe ser dosificada para no convertir el hogar en un lugar donde el trasiego de personas sea constante. Para evitar el agobio de la madre y del bebé es mejor pedir a los amigos y familiares que acudan poco a poco a realizar sus visitas.
– Limpiar y evitar determinadas zonas. La limpieza del hogar debe ser una constante en casa para evitar que el bebé pueda sufrir alguna infección. Por ello también se debe mantener alejado en la medida de lo posible de algunas zonas como el baño o la cocina, habitualmente más sucias y que pueden ser peligrosas para los niños. El paso por estas habitaciones debe ser para fines concretos: comer o el baño, nunca para jugar como puede hacer en el salón.
– Prepara el frigorífico. El niño tiene sus propios alimentos hasta que crezca lo suficiente para comer lo mismo que un adulto. Papillas, purés y otros artículos deberán encontrar acomodo en despensas y frigoríficos. Conforme se vaya acercando el parto, es mejor ir preparando estos sitios.
– Revisar algunos productos. La piel del bebé es más delicada que la de un adulto. Por ello se deben revisar algunos productos como detergentes o suavizantes para evitar la aparición de dermatitis y otros problemas. Siempre es recomendable pedir consejo a algún pediatra sobre cuáles son los mejores artículos en este sentido.
– Prepara su habitación. Ni que decir tiene que la llegada de un nuevo miembro supone preparar una habitación para él. Pintar su nuevo cuarto, colocar los muebles y mantenerla ordenada para cuando el bebé entre en su nuevo hogar. Estos planes deben comenzar en los primeros meses del embarazo para evitar que la madre haga esfuerzos ante de entrar en la fase final de gestación.
Damián Montero
Te puede interesar: