Reanudar la vida sexual después del parto puede llevar un tiempo. Hay mujeres que pueden sentirse preparadas pocas semanas después y a otras costarle meses. Cada mujer y cada circunstancia familiar es diferente, así que lo más importante, es respetar el ritmo interno de cada mujer.
La maternidad cambia a la mujer en muchos aspectos
De repente, ahora hay un bebé que acapara toda nuestra atención, y por qué no decirlo, nos colma de amor y nos sentimos plenas. Si a ese nuevo amor fascinante, le añadimos la dependencia absoluta que tiene de nosotras, el cóctel está servido. Porque mientras aprendemos a vivir ocupándonos de las necesidades del bebé, nos duelen los pechos, estamos cansadas de no dormir, es probable que nos duelan los puntos y las contracciones uterinas, al tiempo que nuestra vagina debe recuperarse del esfuerzo. Es decir, que el sexo tras la maternidad, simplemente no es la prioridad en la agenda.
Cómo afectan los diferentes partos a la sexualidad
Tras el parto, muchas mujeres se sienten presionadas para tener relaciones sexuales poco después, en un momento donde para ellas sólo existe el bebé. Otras, sin embargo, han pasado la cuarentena, e incluso antes, y les ha apetecido tenerlas.
En general, podríamos decir que, el tiempo necesario para recuperarse del parto y volver a tener relaciones sexuales, depende del tipo de parto que tuviste y de la conexión que tengas con tu pareja a partir de la llegada del bebé.
– Después de un parto natural sin complicaciones, ni intervenciones, es posible que las mujeres se sientan listas para el sexo, antes que las demás.
– Si hay episiotomía, después de la cuarentena puede que todavía esté la zona dolorida. Empieza a probar poco a poco y con suavidad.
– Las mujeres que han tenido una cesárea deben esperar a que los puntos estén bien curados, si no podría abrirse de nuevo la cicatriz. Si todavía sientes dolor o sensibilidad en la zona, encuentra posturas que no pongan el peso sobre la cicatriz.
El cansancio, el miedo al dolor u otros miedos en general, como cualquier desgarro vaginal o de tejido cicatricial, pueden desempeñar un papel importante en tu preparación para reanudar el sexo.
Habla con tu pareja ya que las preocupaciones sobre el sexo pueden retrasar la excitación o las ganas. Pasar más tiempo con los preliminares, usar lubricantes naturales y no siempre proceder con la penetración, son estrategias que te pueden ayudar.
Lactancia y sexualidad
Mientras damos el pecho al bebé, nuestros niveles de estrógenos se mantienen bajos para evitar que ovulemos y nos volvamos a quedar embarazadas. Así mismo los niveles de testosterona -la hormona que aumenta la libido- también cae, y la prolactina -la hormona que estimula la secreción de leche- aumenta.
La oxitocina es la hormona que hace que el tejido mamario se contraiga- entre otras cosas-y gracias a ella se libera la leche desde los conductos. Es muy probable, que si tienes relaciones sexuales mientras continúas con la lactancia de tu bebé, la leche se libere durante el sexo y brote. En este caso, puedes poner un sujetador con empapadores de algodón, o alimentar al bebe un poco antes, para que el pecho no esté tan lleno.
Mantén el diálogo abierto con tu pareja
Para mantener una relación amorosa viva, la comunicación y la comprensión mutua, sobre las necesidades del otro, son cruciales. Para muchas mujeres, el postparto es muy delicado, a nivel físico y emocional. La mujer debe encontrar otra vez su propio ritmo, su imagen propia, reencontrarse con ella misma, después de algo tan importante como convertirse en madre. Es totalmente comprensible que el sexo no esté entre sus prioridades. Lo que no quiere decir que no amen a sus parejas, simplemente que para conectarse con otro primero debes conectarte contigo misma.
La falta de privacidad es algo que inhibe a muchas parejas, pero por lo general se soluciona teniendo relaciones cuando los bebés duermen. Si haces colecho, le puedes poner un ratito en su cuna. Hay que tomarlo todo con buen humor y eso facilitará mucho las cosas.
Consejos para facilitar las relaciones sexuales tras el parto
1. Acepta toda la ayuda necesaria para evitar el agotamiento. Busca alguien que ayude en las tareas de casa una vez por semana, compra por internet, cocina una vez a la semana y guarda Tupperwares para el resto de los días, duerme cuando el bebé duerma.
2. Reserva un tiempo para cuidar de ti. Eso te hará conectar contigo misma y te animará a sentirte poderosa y sexi.
3. Asegúrate de que tu suelo pélvico y tu columna vertebral están recuperándose bien.
4. Si con el tiempo persiste el dolor o cualquier otro síntoma hay que consultarlo con el ginecólogo.
En general, tus sentimientos deben ser tu prioridad y la comunicación con tu pareja, la clave del éxito. Cada familia debe re equilibrar su balanza del tiempo y de las obligaciones. Lo importante es vivir ese momento con alegría y tranquilidad. La maternidad despierta en la mujer unas emociones nuevas que debemos explorar y permitirnos sentir y disfrutar. Recuerda que no debes compararte con nadie y que el inicio de la intimidad es algo que te pertenece a ti y sólo a ti.
Roser de Tienda. Licenciada Máster en Quiropractica y Life Coach. Especializada en familia, salud, parto natural, lactancia, y coaching maternal.
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