Hay quienes incluso acuden al cigarrillo electrónico para dejar de fumar, una alternativa con la que esperan encontrar un camino más fácil. Pero cuidado, este artículo no es tan inocuo como puede parecer a priori y entraña numerosos riesgos para aquellos que lo emplean. Por un lado este producto sigue ofreciendo una dosis de nicotina a sus usuarios haciendo más difícil que finalice esta adicción. Además este elemento también entraña un gran riesgo para los más pequeños al aparecer en forma líquida, lo que permite que pueda ser tragado por los niños.
Peligro de intoxicación
Los niños son curiosos, eso es un hecho. Generalmente, la nicotina contenida en los cigarrillos electrónicos tienen unos colores que puede llamar la atención de los más pequeños de la casa. Esto se une a que en algunas ocasiones estos productos son de sabores y emiten un olor que puede atraer a los menores quienes desean probar este artículo que tiene tan dulce aroma.
Por ello ‘investigan’ la fuente de este aroma, la cual encima tiene un color tan llamativo. Al ver este líquido lo beben sin saber que en realidad están tomando nicotina líquida. Tal y como advierten varios pediatras en la revista Annals of Emergency Medicine, este elemento en los cigarrillos electrónicos tiene una alta concentración, lo cual lo convierte en algo altamente tóxico si se ingiere directamente en este estado.
Estos especialistas ponen el ejemplo de una niña de 6 años la cual mezcló en el vaso típico de los frascos de jarabes nicotina líquida con glicerina. Al estar en casa por una lesión en el tobillo, el padre pensó que se trataba de una medicina para tratar su dolor y permitió su ingesta. Esto provocó una intoxicación en la menor que pudo salvarse gracias a la rápida actuación de los progenitores. Pese a ello esta chica precisó de ventilación artificial e internamiento en cuidados intensivos.
Extremar la precaución
En este punto los especialistas recuerdan a los padres la necesidad de poner todos los ojos sobre la seguridad de sus hijos. Hay que pensar que en los menores no existe la misma sensación de peligro que en los padres ya que no comprenden que existen productos nocivos para su salud, como en estos casos la nicotina líquida la cual ven como algo llamativo y que huele bien.
Para evitar que los niños tengan este atractivo, los padres también deben evitar usar el cigarrillo electrónico delante de los más pequeños. Aunque socialmente este artículo se vea como menos nocivo que el tabaco, también puede ser muy peligroso. El color y el olor que tiene puede provocar que el ansia de curiosidad lleve a los menores a querer investigarlo e incluso probarlo.
Los pediatras también recomiendan guardar estos artículos en sitios inaccesibles para los más pequeños. Al igual que los adultos se aseguran que los niños no pueden acceder a productos tóxicos como lejías, detergentes y otros productos, el cigarrillo electrónico también debe estar fuera del alcance de los menores para evitar que puedan ingenirlos.
Damián Montero
Te puede interesar:
– Intoxicaciones en bebés y niños
– Cómo prevenir accidentes domésticos