No hace falta decir que llevar un estilo de vida sano implica hacer ejercicio. La actividad física debe ser una constante en todas las personas y numerosos estudios así lo demuestran. Ahora bien, ¿hay otros factores que hagan que pese a la existencia de estas prácticas, el organismo se resienta igualmente?
Según el Instituto de Salud Global de Barcelona, ISGlobal, sí que lo hay. Uno en concreto: la contaminación atmosférica. Según un reciente estudio de este organismo los niveles de polución provocan que los beneficios de la actividad física se reduzcan considerablemente y por tanto hacer que la salud no se aproveche de los resultados positivos que tiene hacer ejercicio.
Menos beneficios respiratorios
Para comprobar el efecto que tiene la contaminación sobre los beneficios de la actividad física, el ISGlobal analizó los casos de 30 personas sanas que habían realizado ejercicio en condiciones atmosféricas. Es decir, practicaron algún deporte sin polución en el ambiente. Estos participantes tuvieron un aumento significativo de la función de las vías respiratorias a corto plazo que perduraron durante varias horas.
Por el contrario, si se comparaban estos datos con los de personas que habían practicado ejercicio en condiciones de contaminación, los resultados cambiaban. Estos mismos beneficios respiratorios no se daban con la misma intensidad en estos integrantes. De hecho su función respiratoria disminuyó a corto plazo, justo lo contrario que en los casos donde se había realizado alguna actividad física en entornos sin polución.
Partículas en el aire
El ISGlobal destaca también que aunque la actividad física puede ver reducidos sus beneficios por la contaminación, sí que puede ayudar a contrarrestar los efectos de esta sobre el organismo. En concreto practicar ejercicio hace que la influencia nociva de las partículas en suspensión PM2,5, PM10 y PMcoarse.
Por otra parte, Mark Nieuwenhuijsen, coordinador de este estudio, asegura que este es un buen inicio dentro del terreno de la investigación ya que es el primer trabajo que analiza la influencia de la contaminación en el ejercicio físico. «Estudios previos ya habían mostrado que las personas que realizan deporte en la ciudad estaban más expuestas a la contaminación atmosférica, pero había la duda de si la práctica de actividad física en ambientes con alta contaminación era beneficioso o perjudicial para la función pulmonar», explica este profesional.
Ahora esta investigación demuestra que efectivamente la contaminación ambiental tiene un impacto en las vías respiratorias mientras se realiza ejercicio y hace que los beneficios de este se reduzcan. No obstante, Nieuwenhuijsen, destaca que deben realizarse más trabajos que profundicen en estos resultados.
Damián Montero
Te puede interesar:
– 5 deportes para practicar en familia