El motivo exacto por el que se crea una propensión a las alergias es todavía un misterio. No obstante, conocemos maneras de potenciar el sistema inmunológico para combatir la aparición de alergias. El sentido común parece indicar que mientras más limpios estamos, menos riesgo se tiene de enfermar, pero nuevos estudios demuestran que el exceso de higiene puede llevar a la hipersensibilidad o a alergia a sustancias normalmente inofensivas.
La ausencia de microbios, parásitos y bacterias benignas parece confundir al sistema inmune. La mayoría de alergias se desarrollan en la infancia, por lo que la mejor manera de promocionar un desarrollo libre de alergias en nuestros hijos es ahora.
Para evitar desarrollar alergias, nuevos estudios demuestran que el exceso de higiene y la ausencia de contacto con la naturaleza es perjudicial si lo que pretendemos es evitar desarrollar alergias. Por tanto, parece recomendable que los bebés gocen de una suficiente exposición a la naturaleza desde sus primeros meses de vida para ofrecerles una mayor oportunidad de crecer como adultos sin alergias.
Ideas para un juego sano y positivo a partir de los 4 meses
– Darle una pelota de tenis al bebé en una zona con césped. Jugará con ella exactamente igual a como lo haría en casa, pero rodeado de plantas, sol, tierra y ambiente exterior.
– Cuando tu bebé sea capaz de agarrar cosas, darle una pala de juguete e intentar enseñarle a desenterrar.
– Realizar actividades de jardinería con tu bebé. Plantar un huerto o una sola planta y cuidarla a lo largo de las semanas, aunque no florezca.
– Explorar la naturaleza con el bebé. Buscar insectos, dejarle tocar las hojas y las flores, etc. Si aún no gatea o camina, le puedes llevar en brazos y acercarle a las hojas y plantas; las nuevas texturas y colores le estimularán y potenciarán su sistema inmunológico.
¿Es recomendable tener una mascota?
Los niños que conviven con perros y gatos son menos propensos a desarrollar alergias a los animales en el futuro, especialmente si estos viven en el mismo hogar durante el primer año de vida. Un estudio publicado en 2012 encontró que, en comparación con los bebés que nacen en hogares libres de mascotas, los que crecieron con estos tenían casi la mitad de probabilidades de ser alérgicos a ellos en su adolescencia. La exposición a mascotas después del primer año de vida no mostró resultados significativos de tener ningún efecto sobre el riesgo de alergia. Los investigadores sospechan que la exposición temprana a alérgenos de mascotas fortalece el sistema inmunológico.
El sistema inmunológico y su reacción frente a las alergías
El sistema inmunológico es el encargado de proteger el cuerpo de enfermedades mediante la detección y liquidación de agentes externos. La alergia se produce cuando el cuerpo responde de una manera exagerada, o hipersensible, a una sustancia o alérgeno que normalmente no presentaría un peligro para el cuerpo. Cuando un alérgeno se introduce en el organismo de una persona alérgica, el sistema inmune de éste responde produciendo una excesiva cantidad de anticuerpos llamados Immunoglobulinas E (IgE). Estos a su vez crean la inflamación, que resulta en picores e hinchazones.
Existen seis tipos principales de alergia: al polen, a los ácaros del polvo, a animales, a medicamentos, a picaduras de insectos y las alergias alimenticias. Un dato poco conocido es que las alergias no se heredan. Lo que se transmite genéticamente es la tendencia a ser alérgico. Si uno de los dos padres es alérgico la probabilidad de que su hijo lo sea es del 30%. Si ambos padres padecen alergias este porcentaje se incrementa hasta un 70%.
Causas del incremento de la alergia entre la población
El incremento acentuado de alergias en el mundo desarrollado es un tema que ha intrigado a los médicos en los últimos años. Por una parte, se podría argumentar que los instrumentos de diagnóstico han mejorado y que ahora prestamos más atención a las posibles alergias que tienen nuestros hijos. Pero esta explicación por sí sola no es suficientemente para justificar el incremento de personas alérgicas; estudios recientes apuntan a que se debe al exceso de higiene en nuestra sociedad.
El sistema inmunológico humano se ha ido desarrollando durante miles de años adaptándose a las necesidades de su entorno; durante éstos el humano estaba expuesto a un ambiente exterior con un alto nivel de suciedad, parásitos y bacterias. Las condiciones en las que vivimos hoy en día son muy diferentes: no solemos pasar tanto tiempo en el exterior, estamos expuestos a un número inferior de bacterias y solemos utilizar productos de limpieza e higiene que eliminan microorganismos en el hogar. Por estos motivos, nuestro sistema inmunológico se ve infrautilizado por falta de estímulos.
Los científicos creen que esta falta de estímulos lleva al sistema inmunológico a buscar alérgenos donde no los hay, puesto que éste se ha preparado para combatir grandes batallas y, si no llega el contrincante, hace de cualquier producto (especialmente aquellos elementos que cuestan digerir o metabolizar) un alérgeno. Diferentes estudios han demostrado que el riesgo de sufrir alergia y asma esta inversamente relacionado con el número de bacterias presentes en las camas, una medida frecuentemente usada como indicador del nivel de higiene de un hogar. De hecho, el número de alergias en países del tercer mundo es significativamente inferior comparado con países mas desarrollados.
Maite Balda