Las bajas temperaturas pueden desencadenar algunos problemas de salud, si no tomamos las debidas precauciones. Los pediatras de Atención Primaria de la Asociación Española de Pediatría (SEPEAP) han establecido importantes recomendaciones que no debemos pasar por alto si queremos evitar accidentes por frío e hipotermia al estar al aire libre o realizar deportes de invierno.
Causas más comunes de hipotermia
Los niños pequeños pierden la temperatura del cuerpo más fácilmente que los adultos, y son más susceptibles a la congelación y la hipotermia, ya que tienen una superficie de evaporación grande, un control inmaduro de la regulación de la temperatura corporal y una capacidad de producción de calor reducida.
La hipotermia se produce cuando la temperatura del cuerpo desciende por debajo de 35 grados. Los signos típicos son el temblor, la letargia, y en casos graves, las alteraciones neurológicas y el coma. La hipotermia puede ocurrir en cualquier estación del año por accidente, pero en invierno, hay más riesgo de que esto ocurra. Las causas más comunes de hipotermia son:
– Llevar poca ropa o que ésta no sea adecuada para las temperaturas bajas.
– Mojarse o sumergirse en aguas frías.
– Estar con ropa húmeda cuando hace frío o viento durante mucho tiempo.
– Hacer esfuerzos extremos sin ingerir suficiente comida o bebida en climas fríos.
Si aparece confusión o alteraciones mentales, se debe llamar de inmediato al número de emergencias, en España el 112.
Consejos para actuar en caso de hipotermia
– Proteger a la víctima del frío. Llevar al niño o al adulto a una zona interior donde la temperatura sea cálida y arroparla con mantas y abrigos. Si debemos permanecer en el exterior, procura encontrar una zona aislada del viento, el frío y el suelo. Es muy importante, cubrir la cabeza y el cuello ya que son zonas por las que se pierde mucho calor. Si se consigue llevar a la víctima a cubierto, habrá que sustituir su ropa húmeda por ropa seca.
– Intentar calentar a la persona. En caso de que la víctima esté consciente y despierta, y pueda tragar con facilidad, es recomendable que beba líquidos dulces y calientes, sin alcohol.
– Permanecer junto a la persona hasta que llegue el soporte médico.
Cómo evitar accidentes practicando deportes de invierno
1. El casco es imprescindible para prevenir lesiones en caso de caída al practicar cualquier deporte de nieve.
2. Protege los ojos y la piel del sol. El reflejo del sol en la nieve multiplica el riesgo de quemaduras solares tanto en la piel como en la vista. Usa siempre crema solar de protección alta y las gafas de sol homologadas para evitar lesiones.
3. Usa ropa y calzado impermeable. Los monos de nieve y las botas impermeables son esenciales para evitar que tras las caídas los niños estén mojados. Se recomienda que los niños lleven ropa de abrigo de su talla y que se vistan como una cebolla, es decir, con varias capas delgadas que se puedan poner y quitar fácilmente. Los niños deben vestirse con una capa más de ropa que un adulto usaría con las mismas condiciones climáticas. Se recomienda preferiblemente ropa a prueba de viento exterior.
4. Enseña a los niños a descansar. Si lo están pasando bien, los niños no reconocen algunos síntomas como el frío y el cansancio. Es necesario parar están cansados o mojados para beber líquido, tomar frutos secos que aportarán energía y ponerse ropa seca.
5. Estirar y calentar las articulaciones es necesario antes de empezar cualquier actividad deportiva, sobre todo, para los deportes de frío.
6. Aprovecha las horas de luz. Desde bien pronto por la mañana hasta primeras horas de la tarde, cuando empieza a atardecer ya que el frío empieza a ser más intenso.
7. Un buen desayuno muy consistente es fundamental para empezar el día y practicar cualquier deporte de invierno.
Marisol Nuevo Espín
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