Finlandia se convertirá en el primer país que dejará de enseñar caligrafía a los niños a partir de 2016. El aprendizaje de la escritura a mano no dejará de existir, ya que se sustituirá la caligrafía por la letra de palo, separada, pero se dará más importancia a la clase de mecanografía. La polémica está servida.
Aunque cada vez escribimos menos con papel y bolígrafo, y más con escritura mecanografiada, es la primera vez que esto va tener sus primeras consecuencias en Educación.
El Instituto Nacional de Educación de Finlandia ha decidido que la caligrafía ya no formará parte del currículo escolar de Finlandia a partir del curso 2016-2017. Los niños finlandeses sí continuarán escribiendo a mano de forma obligatoria, pero aprenderán a hacerlo con letra simplificada, separada o de palo, como la de la imprenta. Además, las escuelas enseñarán a escribir en un teclado desde el primer curso de Primaria.
No obstante, existen matices a la hora de aprender a utilizar los teclados por parte de los niños. Así, una cosa es localizar la tecla y pulsarla con rapidez, algo que los niños pueden aprender ya en casa gracias a la presencia de ordenadores y portátiles en el entorno familiar sin saber la correcta escritura en teclados de cualquier tipo, y otra cosa muy distinta, es aprender la ‘escritura táctil’, una técnica en la que no es necesario mirar el teclado para localizar las teclas. Esta es una disciplina que, desde hace años, se enseña regularmente en algunas escuelas y en centros de formación empresarial.
Abandonar la caligrafía sí, la escritura a mano no
Conviene dejar claro que el paso dado por Finlandia va dirigido a dejar atrás la caligrafía, no la enseñanza de la escritura a mano, que además tiene múltiples beneficios para los niños pequeños en cuanto a movimientos y destrezas de psicomotricidad fina. Los expertos coinciden en afirmar que lo importante es que se escriba, no tanto el cómo, ya que los niños primero aprenden a escribir con letra de palo, y luego tras hacer ejercicios como cenefas y seguimiento de líneas de puntos, para mejorar la motricidad de la mano y los dedos, aprenden la letra seguida. No obstante, la escritura a mano, ya sea con letra de palo o caligráfica, mejora la lateralidad de la psicomotricidad, ayuda a fijar conocimientos, a estructurar el espacio y el pensamiento.
El formato de las pruebas PISA
Para reforzar esta iniciativa del Instituto Nacional de Educación de Finlandia, las pruebas PISA, que miden el conocimiento de los alumnos de 15 años, se harán en formato digital a partir de ahora. Los alumnos tendrán que contestar las preguntas con un ordenador, no escribirán a mano. En la última edición, en la que Finlandia volvió a coronar la lista de países europeos, ya se incluyó una parte de los ejercicios en formato digital.
Marisol Nuevo Espín
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