La adquisición del lenguaje es un proceso de desarrollo cognitivo y emocional que nos hace únicos como especie y que comienza desde el nacimiento hasta los dos años de edad. Durante este periodo de tiempo, el lenguaje del bebé pasa por diferentes etapas en las que hay que avanzar. Para superarlas, los bebés dependen en gran medida de los estímulos que reciban.
Los padres son las personas que más intervienen en la evolución del lenguaje del bebé. Los estímulos que ofrezcan sus padres en respuesta a los primeros balbuceos, la respuesta que reciba de los demás… alimentarán el deseo del bebé de conectar con los demás.
Las etapas de adquisición del lenguaje
Las etapas del lenguaje del bebé son cinco y tiene una estrecha relación con su edad, ya que el desarrollo cognitivo del bebé está estrechamente relacionado con el avance en la adquisición del lenguaje. No obstante, la motivación y la estimulación son fundamentales para que el bebé adquiera la habilidad de comunicarse.
1. Etapa de descubrimiento. De 0 a 8 meses
– La comprensión del bebé. Desde que nace el bebé es receptivo al tono de voz de sus padres, comprende gestos sencillos y a medida que crece reconocer sonidos con los que anticipará lo que va a suceder en su rutina cotidiana. También reconoce voces, rostros, objetos, identifica el tono de voz, pero no comprende las palabras.
– La expresión del bebé: El llanto es su primera y única forma de expresión durante sus primeros meses de vida. Más adelante, será capaz de sonreír y devolver la sonrisa y de emitir vocalizaciones y balbuceos con las que expresará su estado de ánimo. Descubrirá sus manos y sus brazos para gesticular y será capaz de cambiar el volumen y tono de su voz.
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2. Etapa de comunicación. De 8 a 13 meses
– La comprensión del bebé. Se inicia con el lenguaje que se repite una y otra vez durante las rutinas cotidianas que se repiten como la comida, el baño, el juego… De esta forma, el bebé va comprendiendo las palabras asociándolas a los actos y a los objetos. Justo después empiezan a aparecer los primeros balbuceos que intentan imitar las palabras que comprende.
– La expresión del bebé. A partir de los 9 meses, y coincidiendo con una maduración cortical y con el hecho de haber establecido una confianza con el adulto, el bebé despliega su intencionalidad comunicativa. En esta fase, el bebé no es capaz todavía de expresar alguna palabra «comprensible», pero los adultos que están en contacto con él pueden entender la idea que tiene en la cabeza. Sigue triangulaciones de atención conjunta, saluda, se despide, protesta, agita sus manos… y emplea balbuceos y vocalizaciones.
3. Etapa de palabras-frase. De 12 a 18 meses
– La comprensión del bebé. Se nota un aumento de las palabras que comprende, y al mismo tiempo, comprende órdenes sencillas relacionadas con situaciones cotidianas y hábitos diarios.
– La expresión del bebé. A partir de su primer cumpleaños, el bebé pronunciará su primera palabra. Este momento es muy especial y la misión de los padres es motivarle para que lo intente una y otra vez, aunque sus primeras palabras no sean completas o no se pronuncien completamente. También es posible que utilice una misma palabra para expresar varias cosas.
4. Etapa de combinación de dos palabras. De 18 a 24 meses
– La comprensión del bebé. Su comprensión del vocabulario es cada vez más amplio y se nota al intentar unir palabras de dos en dos.
– La expresión del bebé. Destaca por la combinación de dos palabras, que junta sin nexos, es decir, sin artículos, preposiciones o verbos. Así empieza a hablar. Aún su expresión del lenguaje carece de estructura gramatical. Mamá casa puede servir para expresar muchos significados como quiero ir a casa con mamá, mamá está en casa…
5. Etapa de oraciones simples. De 24 a 36 meses
– La comprensión del bebé. A estas alturas, se podría decir que ya lo entiende todo o casi todo.
– La expresión del bebé. Las uniones de palabras dan paso a frases sencillas, cada vez más complejas, que se van completando con elementos y nexos de unión. Poco a poco, estas frases sencillas serán cada vez más complejas, lo que permite al bebé dar un gran paso en la adquisición del lenguaje: sostener conversaciones cada vez más largas.
Marisol Nuevo Espin
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