MADRID, 2 Enero, 2013
Cerca del 70 por ciento de los niños que padecen enuresis no están diagnosticados correctamente, tal y como evidencia una encuesta realizada por Ferring recientemente con motivo del inicio de las vacaciones navideñas, las cuales pueden ser «una pesadilla» para estos menores.
En concreto, hasta un 83 por ciento de los pediatras españoles piensa que la mayoría de los padres «no busca ayuda médica» ante la aparición de este problema, explican los expertos. Sin embargo, las cifras de incidencia alcanzan ya el 15 por ciento en los niños de cinco años y el 10 por ciento en los de siete años, subrayan.
La enuresis nocturna «es más común en niños que en niñas», una patología que, «si no se trata, puede persistir en la edad adulta», sostienen. De esta manera, pueden seguir sufriendo pérdidas de orina durante el sueño y sin despertarse tras la micción.
Para los expertos, es necesario que se produzcan dos o más episodios de escapes al mes para comenzar a hablar de enuresis. Por su parte, los padres consideran que los hijos la superarán con la edad, pues la achacan «equivocadamente» a celos, estrés o a alguna preocupación, afirman los especialistas.
EL 85% DE LOS CASOS TIENE UNA CAUSA DE ORIGEN HEREDITARIA
No obstante, «en el 85 por ciento de los casos de niños con enuresis se trata de un problema hereditario», manifiestan. Así, investigaciones recientes señalan como «clave» un gen del cromosoma 13, «aunque se están estudiando otros genes y cromosomas que podrían tener relación», advierten.
En este sentido, explican que la hormona antidiurética «se sintetiza en el cerebro y es la encargada de regular la cantidad de orina». De este modo, «mantiene un nivel constante durante el día y que aumenta por la noche para reducir la producción de orina», apuntan.
Sin embargo, las personas enuréticas, «por causas aún desconocidas, no liberan más hormona por la noche igualándose la producción de orina con el día», observan. Esto produce que la vejiga se llene «y se produzca la pérdida involuntaria durante el sueño», concluyen.