ALICANTE, 17 Julio
Su hijo tiene solo 14 años pero ya no pueden con él. Amenazas, insultos, vejaciones, malos tratos e incluso robos de dinero y joyas constituyen el calvario diario de unos padres de Alicante que no han visto otra opción que pedir una orden de alejamiento de su propio hijo.
La Fiscalía de Menores, sin embargo, ha rechazado esta orden de alejamiento. Les ha dado una solución temporal: el chaval ha sido internado en un centro de menores a la espera de juicio, pero en las salidas de fin de semana y permisos tendrá que regresar a casa con sus padres, según ha podido saber este diario.
El objetivo es que psicólogos y técnicos puedan trabajar con él durante su internamiento para tratar de mitigar su comportamiento agresivo. Sin embargo, los padres no tendrán la orden de protección que solicitaron, por lo que no les quedará otro remedio que acoger a su hijo en casa durante estas salidas del centro.
Al parecer, la situación familiar se volvió insostenible. El menor, hijo único, supuestamente es consumidor de drogas, lo que exacerba su agresividad. Según fuentes próximas al caso, insulta y amenaza a sus progenitores para conseguir sus propósitos, les ha propinado empujones y, en reiteradas ocasiones, les ha quitado joyas y dinero en efectivo.Todo ello supuestamente para poder seguir consumiendo, precisaron fuentes próximas a la investigación.Sin embargo, esta semana sus padres dijeron ‘basta’.
Desesperados, se presentaron en comisaría para denunciar a su propio hijo, y unos agentes de la Policía Nacional se lo llevaron esposado. El adolescente pasó la noche en los calabozos, y, ayer, pasó a disposición de la Fiscalía de Menores. No ha trascendido nada sobre su declaración, pero la fiscal de guardia consideró que había motivos suficientes para decretar su internamiento en un centro por un delito de maltrato familiar.
Tras su comparecencia, la Policía Nacional se lo volvió a llevar esposado, camino al centro de menores donde permanecerá a la espera de ser juzgado mientras la Fiscalía no acuerde su libertad vigilada, explicaron fuentes próximas al caso.